Las personas están naturalmente atentas a las señales de advertencia relativas a su salud. Estas preocupaciones incluyen el flujo sanguíneo y la circulación del cuerpo. Pero, ¿cuáles son las señales de advertencia de las afecciones vasculares?

Si conoce la terapia del suelo pélvico, es posible que haya dado a luz recientemente. O puede que haya sufrido un dolor pélvico o lumbar crónico y esté buscando tratamientos alternativos para su dolor. No se preocupe. La terapia del suelo pélvico no se limita a tratar el dolor pélvico y de espalda.

Emma ha tenido calambres pélvicos de forma intermitente durante siete meses. Al principio, no se alarmó porque la mayor parte del tiempo el dolor es manejable. Siempre pensó que el dolor desaparecería porque es habitual que las mujeres experimenten dolor en la región pélvica durante el ciclo menstrual.

Pero con el paso del tiempo, los calambres se hicieron más intensos y duraron más tiempo. El dolor sordo que experimentaba incluso empeoraba durante el periodo; y sus ganas de orinar aumentaban. También notó unas venas grandes y abultadas en la región pélvica cercana.

Experimentar dolor pélvico antes, durante o después del sexo es bastante aguafiestas y puede ser incómodo de manejar. Si el dolor es intenso y ocurre con frecuencia, puede haber un problema subyacente más grave que requiera evaluación médica.

Es probable que sentir dolor después del sexo se deba a ITS, fibromas, trauma emocional, endometriosis, infecciones urinarias, penetración profunda o dismenorrea. Sin importar el caso, es crucial buscar un profesional médico que pueda ver lo que sucede en el interior para que usted reciba el tratamiento que necesita.

Dolor pélvico y mujer posmenopáusica

Una vez más, es hora de irse a la cama, pero en lugar de quedarse dormido, está dando vueltas, tratando de que sus piernas estén cómodas y relajadas. Su pareja suspira, obviamente consciente de su movimiento casi constante. Usted se pregunta si alguno de ustedes tendrá alguna vez otra buena noche de descanso.